viernes, 23 de marzo de 2012

BAKLAVA

INGREDIENTES:
150 g de azúcar
300 g de pasta filo (12 láminas)
100 g de pistachos
250 g de nueces
150 g de almendras
50 g de piñones
300 g de mantequilla
5 cucharadas de agua de azáhar
1 limón/ su jugo y su cáscara
1 rama de canela/ 2 cucharadas de canela molida
1 vaso de agua
2 clavos de olor

 PREPARACION:

En una picadora picamos las almendras y las nueces. El tamaño debe ser similar o más pequeño que un grano de pimienta. Colocamos todos los frutos secos en un bol grande y añadimos 3 cucharadas de azúcar y la canela molida. Removemos todo muy bien para que se mezclen los sabores. Este será el relleno del baklava, es imposible que estos pastelillos no esten buenos.
Derretimos la mantequilla al baño maría o en el micro hasta que quede líquida y preparamos la pasta filo en una superficie cómoda para trabajar. Necesitaremos al menos 12 hojas de pasta filo.
Engrasamos un recipiente ayudados con un pincel de silicona, en mi caso he elegido una fuente típica de hacer bizcochos de 30 x 40 cm. Una vez engrasado empezamos a colocar las hojas de pasta, untándolas con mantequilla una a una. Colocamos 2 hojas juntas como base y rellenamos con una capa de frutos secos. Seguimos colocando capas de pasta filo, capas de relleno hasta que tan solo nos queden 2 láminas que serán la cubierta del pastel. La última capa tambien la pincelamos con mantequilla. Presionamos bien para que quede compacto y acto seguido enfriamos en la nevera durante 30 minutos.
Sacamos la fuente y cortamos cuidadosamente el pastel con un cuchillo bien afilado y largo en forma de rombos o cuadraditos, depende de la fuente que uses.
Precalentamos el horno a 190º durante 5 minutos e introducimos la fuente en el horno en la bandeja del medio, con calor arriba y abajo durante 30 minutos.
Preparamos el almíbar mientras la baklava se está haciendo. Calentamos en un cazo un vaso de agua junto con el agua de azahar y cuando hierva añadimos una cucharada de zumo de limón, canela, cáscara del limón, los clavos de olor y 5 cucharadas de azúcar. Removemos con una cuchara de madera durante 15 minutos y cuando esté listo dejamos enfriar. Colamos y reservamos para después.
Sacamos los baklavas del horno y los bañamos con el almíbar. Picamos los pistachos y los espolvoreamos por encima. Dejamos enfriar durante 2 horas antes de servirlos. Es de por si un postre muy nutritivo, así que un poco de café o un buen té de menta como acompañamiento le quedan perfectos.

No hay comentarios: